Junto a la cuneta de la carretera, aprobechando cualquier espacio un montón de especies parecen querer buscar su sitio.
Todos estos ejemplares se encontraban a menos de 50 metros unos de otros.
Dactilorriza maculada, preciosa orquidea saliendo justo junto al asfalto. Las orquideas necesitan tierras poco abonadas, ya que este destruye unos hongos en sus raices, con los cuales establece una simbiosis y las permite germinar.
Escila de primavera,
Violeta, pero aun sin desplegar sus pétalos. Me recordo una zapatilla. Quizá algún duendecillo la perdió.
Pulmonaria. Es increible el expectáculo cromático de estas florecillas, que segun les da la luz parecen casi azules, violetas, rosas…
Lechetrezna, su sabia es lechosa, y venenosa. Cuidado de tocarse los ojos despues de estar en contacto con ella.
Hierba de San Roberto, o el auténtigo geranio. Si se frota la hierba entre las manos desprende un olor muy desagradable. Aunque mejor no hacerlo y disfrutar de su belleza.
Bueno, hay que decir que el asesoramiento de Txemi a sido indispensable para este artículo.