Como si se tratara de el juego que viene en los periódicos os muestro dos fotos del mismo sitio con unos tres años de diferencia entre una y otra.
Ha pasado bastante tiempo y bastantes cosas en esos tres años, y fotográficamente hablando creo no haber parado en ningún momento de intentar aprender.
Para empezar con las diferencias habría que destacar el momento. Una con niebla y la otra con nieve, aunque es cierto que aquel día de niebla estaba todo muy seco y eso se nota en el suelo.
Pero donde más diferencias se ven es en la composición.
La inclusión del árbol abajo a la derecha creo que le da más equilibrio a la foto. También nos hemos colocado un pelín más a la derecha y más cerca para que no se perdiera el origen del riachuelo. En la segunda lo hemos colocado estratégicamente para dar mayor profundidad a la toma.
Otra de las cosas que no me llenaban de la primera foto era la cantidad de suelo que quedaba a los pies del haya, bueno, creo que en la segunda toma eso se ha solucionado.
Quien sabe, quizá dentro de tres años vuelva con otra toma totalmente distinta.
O prueba a hacer con el mismo encuadre que la foto de invierno fotos en cada una de las otras tres estaciones.
Hola Javier. Primero decirte que me encantan tus fotos, haces un gran trabajo. Y comentarte éstas dos imágenes que ambas están muy bien, pero tienes razón en que la primera tiene demasiado suelo por delante de los árboles. Por lo demás perfectas. Un saludo.
Me gustan las dos fotos, aunque me quedo con la segunda por las mejoras que comentas en la composición. Además el paisaje invernal es fantástico. Enhorabuena
¡Preciosas imágenes y fantástico blog! Un saludo desde Granada.
Hola Javier, me gustan las dos fotos pero yo discrepo y me quedo con la primera. Con tu permiso y con ánimo de reflexionar y de aprender todos, para mí el árbol de la derecha y la ausencia de la niebla, que hace que se vean los árboles del fondo, contribuyen a que la imagen sea más desordenada y caótica.
Respecto al suelo no creo que sea un error, pues es la parte derecha la que está marcando el corte en el encuadre. Además el montículo elevado yo creo que «sustenta» el peso visual del árbol y equilibra la pendiente de la derecha, además de situarlo en un punto de mayor fuerza en el encuadre.
La toma en diagonal y la lejanía «cierran» mejor las ramas, que en la segunda toma se cortan de forma más evidente, molestan más.
Y finalmente esas hojas rojizas de la segunda foto en el centro de la toma me distraen. Seguro que yo tampoco me habría dado cuenta si hubiese estado disparando.
Enhorabuena por tu blog y por tus fotos. Y gracias por la revista.
Un saludo.
Antes de leer tu aclaración sobre las diferencias, he intentado buscar yo las mías, y tengo que decir que algunas de las tuyas las he «visto».
El suelo «sobrante» de la primera y el árbol añadido por la derecha de la segunda han sido mis dos diferencias. Y por supuesto, he analizado sobre el objetivo utilizado y la distancia de disparo. Creo que en este caso ha ganado el angular, jejejeje!
También he leído el comentario que te hace Luis, y creo que tiene parte de razón en lo que se refiere al caos de la invernal, aunque se vea menos acentuado al no haber colorido.
Dentro de tres años, vendrás con la composición de la segunda, el bosque nevado de la segunda y la niebla de la primera, seguro!!!
Un abrazo,
Iker