Control creativo de la exposición (with a little help from my friends)

La base de la fotografía es la luz. Entenderla, domarla, trabajarla e interpretarla. Los medios actuales nos ayudan a conseguir rangos dinámicos en nuestras tomas que antes parecían algo imposible.

Pero esta «facilidad» no significa que todas nuestras imágenes deban estar iluminadas de la misma forma, de la manera «estandar».

En muchas ocasiones si interpretamos lo que tenemos ante nuestros ojos de una manera menos convencional podemos conseguir resultados sorprendentes.

Con la ayuda de unos amigos vamos a ver varios ejemplos de lo que os comento y de lo que podemos conseguir en nuestras tomas. Como las posibilidades que se nos presentan son muy amplias vamos a trabajar sobre todo con las técnicas de clave alta y clave baja.

Si buscáis en internet las definiciones de estas dos técnicas veréis que básicamente os dirán que la clave alta  es  aquella en la que no existen negros sino grises suaves y blancos, y la clave baja  todo lo contrario, no existen tonos claros o en todo caso son blancos o grises muy claros que no tienen gran presencia en la escena. Pero más importante que esto es lo que nos proporciona el uso de estas técnicas, ya que al forzar los blancos o los negros podemos eliminar objetos que nos distraen de nuestro mensaje fotográfico. Esto lo váis a ver muy claro en los ejemplos que os muestro.

imagen tomada por Mario Suárez Porras

Para empezar os muestro esta imagen de un alcatraz. Parecería que lo mas correcto sería exponer para no perder las texturas de las plumas. En este caso el autor decidió sobre exponer con la clara intención de quemar toda esa zona, fundiendo la parte más clara del animal con el cielo, dejando una imagen con muy pocos elementos donde la fuerza de la mirada del ave y las plumas de las alas tienen todo el protagonismo.

Imagen tomada por Jep Flaqué

Si alguna vez habéis intentado fotografiar un riachuelo entre la nieve sabréis las dificultades que tiene intentar mantener bien expuesta toda la imagen.
Aquí el autor en vez de enfrentarse a esa dificultad se ha aprovechado de ella y nos muestra una imagen que casi parece un folio en blanco rasgado.

Imagen tomada por Miguel Lasa

Del mismo modo que fundiendo los blancos podemos conseguir imágenes más plásticas y visuales eliminando elementos con la clave baja podemos hacer lo mismo con las sombras. En este caso, si hubiéramos intentado que toda la toma quedase bien expuesta y con información en toda ella no tendría la misma fuerza.
Aparecerían otros elementos que nos distraerían y sin duda esa curva de luz que silueta al oso hasta llegar a su ojo no funcionaría igual de bien.

Imagen tomada por Ángels Ortega

En la fotografía de paisaje es curioso como nos afanamos en poner filtros y demás recursos para conseguir mantener en el rango dinámico de la cámara el gran contraste de luz que tenemos ante nuestros ojos. En esta ocasión se ha optado por no buscar eso y dejar que el cielo quemado se funda con el mar consiguiendo que las rocas parezcan estar flotando.

Imagen tomada por Pere Soler

Para terminar quiero mostraros una imagen en la que el juego con la exposición de la luz ha sido fundamental. Sin ser una clave alta al uso el alto contraste de la toma junto con los trazos de luz entre los árboles consiguen dar carácter al paisaje que tenemos ante nosotros.

Sin duda hay muchas más opciones para jugar con la exposición de nuestras fotografías, y algunas iremos viendo más adelante. Lo importante es no quedarnos siempre con el paradigma de la exposición perfecta, y saber que un uso personal de la misma nos puede dar grandes frutos.