Texto perteneciente a la sección «Susurros de la naturaleza» de la revista LNH
La luna, Venus y Júpiter
En muchas ocasiones salimos a hacer fotos esperando que algún fenómeno extraordinario adorne nuestra fotografía.
A veces, mirando las predicciones del tiempo o conociendo el lugar, podemos aventurar lo que puede llegar a ocurrir.
¿Pero qué ocurre cuando sabes que algo extraordinario va a suceder sí o sí?
En ese momento se despierta el instinto de cazador que todos llevamos dentro. Sabes que lo tienes delante y que no puedes fallar. Te preparas con antelación, observas el objetivo, escoges el ángulo más adecuado y disparas.
No tienes muchas oportunidades, la presa se mueve y si no eres certero perderás la ocasión.
Es preciosa !!